OPINIÓN | 14 años conectados contigo
Hablar de la historia de De Culto Radio, es hablar de una búsqueda constante de oportunidades en todo el sentido de la palabra. Desde nuestros comienzos, hemos buscado constantemente adaptarnos a un medio en constante cambio, pero siempre procurando entregar los más altos estándares técnicos como de contenidos.
Una oportunidad
¿Y por qué hablamos de oportunidades? Porque inicialmente, bajo el formato de programa radial en una modesta radio comunitaria, encontramos el espacio que sencillamente nadie nos daba, a menos que pagásemos por ello.
Durante dos temporadas (1998-2000) en la desaparecida Radio Maipú, y posteriormente otras dos temporadas (2003-2004) en la también desaparecida Radio Mirador (y después como Radio Eme), nuestra única aspiración fue entregar buena música y procurar estar al día con las últimas novedades del rock/pop latino.
Un formato en su momento exitoso, pero insuficiente como para proyectar algo a largo plazo.
Mutando hacia una nueva experiencia
Pero como siempre se dice, todo pasa por algo. Porque tras terminar la última temporada como programa radial, ese mismo año 2004 decidimos potenciar nuestro naciente portal decultochile.cl en medio de un internet que no era siquiera la sombra de lo que conocemos hoy.
Pero faltaba algo: faltaba la experiencia con el público. Cómo adaptar un medio tan masivo como la radio a una plataforma completamente desconocida como internet. Tras una serie de transmisiones experimentales, finalmente el 13 de septiembre de 2006 a los sones de «Vicio» de Los Ratones Paranoicos, De Culto Radio iniciaría sus transmisiones.
Fue así como fuimos ampliando la oferta musical y empezamos escarbar entre lo que algunos llaman «memoria auditiva» y fuimos reencontrándonos con grandes clásicos de los años 1970, 1980 y 1990 que por alguna razón estaban confinados al olvido en alguna discoteca personal.
Pedidos Express: de clásico a leyenda
Las alianzas siempre fueron un factor clave en el desarrollo de De Culto Radio.
Uno de nuestros grandes hitos fue la creación de «Pedidos Express», nuestro programa de pedidos musicales donde las cartas y llamados telefónicos de antaño habían dado paso al correo electrónico y al querido MSN Messenger.
Y si bien teníamos una sintonía aceptable, el empezar a salir en simultáneo por Canal 80 (en ese momento la radio on-line más escuchada en Chile) sencillamente nos elevó a una especie de mito urbano.
Durante nuestros primeros cuatro años al aire, Pedidos Express pasó a ser un espacio emblemático de nuestra programación, tanto que hasta el día de hoy se recuerda con cariño y nostalgia. «El Clásico de la Mañana» como lo bautizamos en su momento, había sido un éxito.
Viña: el gran hito
Y ya que hablamos de oportunidades, suele decirse que estas suelen presentarse de las formas más variadas en los lugares y momentos más insospechados.
Eso fue lo que pasó cuando en 2007, con menos de 6 meses funcionando, y contra todo pronóstico, logramos acreditarnos por primera vez en el evento musical más grande de Chile y América Latina: el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar.
Si bien hasta ese momento Viña estaba reservado a los grandes medios por excelencia: la radio, la televisión y la prensa escrita, nuestra llegada trajo un efecto no deseado con el tiempo y del cuál nos sentimos profundamente orgullosos. Desde ese momento, la presencia de los medios digitales en la Quinta Vergara fue cada vez más en ascenso.
Durante 12 años, cubrimos con profesionalismo todas las aristas posibles del certamen. Y eso siempre fue reconocido tanto por los canales organizadores como por colegas de distintos medios.
Desgraciadamente, producto de los efectos del estallido social del 19 de octubre de 2019, la actual organización restringió al máximo posible las acreditaciones para los medios en general, y especialmente para los medios digitales, lo cual trajo como consecuencia que por primera vez no pudiéramos estar presentes.
Pero a pesar de ello, Viña no sólo constituyó una de las más grandes coberturas que hayamos hecho en todos estos años, sino que también nos hizo crecer como medio.
Multiplataforma: La familia crece
Al inicio de la columna, mencionaba que hemos buscado constantemente adaptarnos a un medio en constante cambio. Y si bien, el camino recorrido ha sido largo y gratificante a la vez, con la necesidad de alcanzar nuevas audiencias con nuevos formatos y sumado al surgimiento de las redes sociales, había llegado el momento de diversificar aún más nuestra oferta.
En 2011, cambiamos nuestro centro de operaciones a la ciudad de Valdivia, desde donde nos mantenemos en la actualidad, y en 2013 dimos el primer paso en la construcción de lo que sería nuestra nueva multiplataforma.
Ese objetivo se logró con la creación en 2013 de Allegro Radio, un formato que sencillamente reformuló el concepto de radio cultural en Chile a partir de una oferta basada en ritmos como smooth jazz, bossa nova, clásicos orquestados y bandas sonoras, además de cápsulas seleccionadas.
Desde ese mismo año, mantenemos en forma exclusiva hasta el día de hoy el Festival Internacional de Jazz de Valdivia, uno de los más longevos e importantes de la escena nacional. Esto fue fundamental para fortalecer una oferta de calidad para una ciudad cultural como Valdivia.
La «Música con Altura» desde ese momento pasó a ser un concepto.
Por otra parte, a fines de 2019 aumentamos nuestro alcance con la creación de La Rockola, un formato orientado a los grandes oldies de los años 1950, 1960 y 1970.
Los nuevos desafíos
De Culto Radio se ha reinventado tanto como ha sido posible y con éxito. Una muestra de ello es el haberse adjudicado en tres oportunidades (2015, 2016 y 2019) el Fondo de Fomento de Medios de Comunicación Social del Ministerio Secretaría General de Gobierno.
Y si bien su oferta actual sigue estando orientada al segmento adulto contemporáneo, posee una fortaleza que la hace única: mientras varias radios han ido ajustando su repertorio a éxitos un poco más actuales, De Culto Radio acumula un catálogo musical con lo más destacado de los últimos 50 años y sigue atento a los nuevos lanzamientos y tendencias musicales de hoy.
Pero además, Allegro y La Rockola han llegado a complementarse perfectamente como formatos especializados de nicho, lo que le da aún más valor a nuestra propuesta.
No sólo eso, nuestra forma de trabajar ha servido de inspiración para varios comunicadores del medio on-line, algo que sin duda nos alienta aún más a seguir en la senda ya trazada.
Y en tiempos de pandemia, donde el consumo de medios ha ido creciendo a niveles que no se daban hace años, seguimos trabajando en nuevos formatos a futuro, así como también en explorar las posibilidades que brindan los Social Media.
Valdivia y la Región de Los Ríos pueden tener la certeza que seguimos avanzando para seguir conectados contigo hoy más que nunca, y por mucho tiempo más, entregando un producto de calidad como sólo el tiempo y la experiencia nos han enseñado.
¿Hasta dónde podremos llegar? Sólo el cielo es el límite.