Opinión: Valdivia, Ciudad de Agua

Nos ha tocado la fortuna de vivir en una parte del planeta en la que el agua es abundante. No experimentamos la escasez de este elemento esencial para la vida, pero sí podemos crear conciencia en lo relativo a su uso responsable, ya que es lo que da vida a nuestro paisaje sureño, no solo formando parte de nuestra red fluvial y lacustre, sino que también manteniendo viva la naturaleza que nos rodea.

El agua es un medio para la recreación, contemplación, práctica de deportes y navegación; y al mismo tiempo ha sido parte de la historia de la ciudad. El aspecto fluvial no solo es turismo, es mucho más. El río representa el pasado presente y futuro de una ciudad que, al igual que las aguas que la circundan, está en permanente movimiento. Como valdivianos, el agua forma parte de nuestras emociones y de nuestros recuerdos de infancia.

La ciudad está ubicada en la confluencia de ríos Calle-Calle y Cau-Cau, y quienes vivimos en Valdivia somos conscientes de esos ríos que vemos como parte natural de nuestra identidad. Tenemos una visión de una ciudad rodeada por las aguas, pero, tal vez, hemos perdido en parte la visión de la ciudad desde el agua. Ella nos cuenta una historia donde confluyen los aportes de diferentes culturas, los pueblos originarios, los inmigrantes alemanes, los vestigios de las antiguas industrias, los efectos de los movimientos telúricos en el paisaje, humedales, flora, fauna, y los modernos edificios construidos en las últimas décadas.

Importantes hitos que nos identifican tienen que ver con el agua, el célebre río Calle Calle, la feria fluvial, los campeonatos de remo, el borde-río, donde históricamente se producía el intercambio de alimentos de los lafkenche, transformándose luego en la carretera que transportaba a los trabajadores de la industria local, para hoy alojar las embarcaciones que ofrecen recorridos fluviales y que son la postal característica de la ciudad.

La ciudad de Los Ríos fue incorporada en octubre pasado a un grupo de 26 urbes que desarrollarán instrumentos para un mejor futuro ambiental y promoverán el desarrollo urbano a escala humana, proyectándose como la primera ciudad sustentable donde el río será el eje en torno al cual se desarrolle.

Desde Latitud 40, promotora de productos turísticos de Valdivia, invitamos a disfrutar de nuestra red fluvial y a ver nuestra ciudad desde los ríos, creando la conciencia de que el agua no solo forma parte del paisaje, sino que también es un espacio que nos ofrece una perspectiva distinta, que conjuga historia y naturaleza, nos transporta al pasado, valorando el presente y proyectándose en un promisorio futuro.